Me gustaría compartir mi opinión para que muchas mujeres y/o parejas sientan que hay clínicas donde se van a sentir cómodas en el proceso, sea cual sea.
A finales de 2016 decidí pedir información sobre la inseminación artificial, la FIV, la congelación de óvulos… Desde el primer momento recibí un trato maravilloso. Me sentí muy bien nada más entrar por la puerta. El personal es un encanto y siempre te reciben con buen humor y sonrisas. Te hacen sentir cómoda lo cual es un estímulo muy importante.
Me atendió Sophie, la chica que se encarga de la parte administrativa. Lo único que puedo decir es GRACIAS por el trato tan humano, la cercanía, la profesionalidad y el acompañamiento que he recibido por su parte. Por ese motivo me decliné por esta clínica, porque sólo este primer contacto ya me indicó que el siguiente contacto con doctores, enfermeras, etc. ¡sería igual!
Efectivamente, la clínica cuenta con grandes profesionales. El Doctor César, un gran profesional que te habla muy claro y te ofrece las mejores posibilidades según las circunstancias de cada persona. Lo más importante cuando empiezas un tratamiento es saber que todo puede pasar, y que el Doctor sea una persona consecuente que hace lo que dice, es un valor importante para decidirte por esta clínica.
Raquel, la enfermera, un encanto de persona y una gran profesional, siempre pendiente de todo en cada momento. Su amabilidad te despierta comodidad y confianza.
En este momento, con 36 años, estoy realizando el tratamiento de vitrificación de óvulos y embriones para cuando me decida a ser madre. El proceso ha sido tan sencillo y fácil de llevar que me ha hecho olvidar todas esas ideas con las que partía, para quedarme con la idea de que muchas veces todo acaba siendo más sencillo de lo que parece… ¡sólo es necesario tener positividad y confianza!